Un día más conmigo


Hace unos días, leí unas cartas que encontré en el "baúl" olvidado de mi cuarto; encontré mensajes diversos, desde la maestra que me andaba ligando hasta el papelito de la secundaria "Pásame la 3". Qué tiempos aquéllos. Era divertido pasarse papelitos para contar lo que te había sucedido los días que no se vieros. A veces me río porque nos podíamos esperar al recreo para conversar, pero era magnífica la adrenalina de ser atrapada en el chisme de los papelitos.

También encontré unas cartas de unas amigas de la prepa, cuando estaba en el COBACH 13. Cartas que contenían buenos deseos y muchos besos. Qué emocionante es saber que mi adolescencia tuve amigos así. En la primaria era como toda niña: socarrona e insulsa. No tenía amigos o amigas, a nadie le agradaba hablarme, pues yo hablaba de cosas inusuales.

En ese mismo baúl, encontré unos boletos del cine... de muchas funciones: Harry Potter, La llave secreta, El hombre araña, El aro 2, SuperMan, entre varios otros. Siempre me ha gustado guardar los boletos del cine, así como la nota de mis rentas de películas.

Ayer fui a una fiesta... no manchen, me dormí a las cinco con cuarenta minutos. Ya se me ha quitado el sueño.


Película que vi ayer con William: Mundo fantasma (inconclusa)

Canción que estoy escuchando: Onslaught - "Twisted Jesus"

Comentarios

Anónimo dijo…
A mi me pasa con la fotografías. Cada uno de esos objetos son fragmentos de vida, episodios que conforman la memoria.

Hace mucho que no me dejas un comentario. Pensaré que lo publicado cada vez es menos interesante...